Durante el mes de Tauro se están recibiendo muchas energías de paciencia y tranquilidad que pueden llegar a ocasionar problemas en mediano plazo. Las energías nos estarán haciendo ser muy complacientes y tranquilos, lo que nos hará llegar al límite de la pereza y podría desatar malentendidos entre las demás personas.
Al tener energías activas y de acción, estamos en un ambiente de alerta durante el cual podemos preguntar y comunicarnos de forma eficiente para poder realizar actividades de forma correcta. Cuando estamos llenos de esta energía, preguntamos, creamos y nos comunicamos. Pero un problema puede surgir cuando cambiamos de un estado activo a uno pasivo. En el estado pasivo tendremos mucha paciencia y tranquilidad, la cual nos hará creer que las cosas están bien. No tendremos esa chispa dentro de nosotros que antes nos hacía revisar dos veces si la información estaba correcta. Simplemente aceptaremos la información que recibamos y creeremos que está bien de la forma que la interpretemos, aun cuando puede llegar a existir algún error que pasará desapercibido y creará un problema más adelante.